La melancolía
¿Sabéis por qué una vaga tristeza se apodera a veces de vuestros corazones y os hace encontrar la vida tan amarga?
Es vuestro Espíritu que aspira a la felicidad y a la libertad y que, ligado al cuerpo que le sirve de prisión, se agota en vanos esfuerzos para salir de él.
No obstante, al reconocer que esos esfuerzos son inútiles, cae en el desaliento, y como el cuerpo sufre su influencia, se apoderan de vosotros la languidez, el abatimiento y una especie de apatía, que hacen que os consideréis desdichados.
Creedme, resistid con energía esas impresiones que debilitan vuestra voluntad.
Esas aspiraciones a una vida mejor son innatas en el alma de todos los hombres, pero no las busquéis en la Tierra.
Ahora, que Dios os envía a sus Espíritus para instruiros en la felicidad que Él os reserva, esperad con paciencia al ángel de la liberación que habrá de ayudaros a desatar los lazos que mantienen cautivo a vuestro Espíritu.
Recordad que, durante vuestra prueba en la Tierra, debéis cumplir una misión que no sospecháis, ya sea consagrándoos a vuestra familia, ya atendiendo las diversas obligaciones que Dios os ha confiado.
Y en caso de que, en el curso de esa prueba, al dar cumplimiento a vuestra tarea, veáis caer sobre vosotros los sobresaltos, las inquietudes y los pesares, sed fuertes y valerosos para soportarlos.
Afrontadlos con resolución.
Duran poco tiempo, y habrán de conduciros junto a los amigos a quienes lloráis, que se alegrarán de vuestra llegada y os tenderán los brazos para conduciros a un lugar donde no tienen acceso las aflicciones de la Tierra.
(Espíritu François de Genève. Burdeos.)
Comunicación mediúmnica extraída del libro El Evangelio según el Espiritismo, codificado por Allan Kardec
Mil gracias , en hora buena leo este mensaje de amor . Perdi a seres queridos en esta pandemia , pero esto me reconforta y me motiva a seguir viviendo y evolucionando en conocimiento.