julio 10 2015

El Desánimo

aHay momentos en la vida de cada ser humano, que las cosas se presentan oscuras, inciertas, problemáticas. No sabemos qué camino tomar y, pese a la Doctrina Espírita tan consoladora y útil, parece como que no es suficiente; que las cosas terrenales, las materiales, etc., sean más importantes que aquellas que nuestros ojos no pueden ver, aunque creamos que existen; pero este mundo es aún tan atrasado, que nos cegamos ante los acontecimientos negativos, ante las pruebas difíciles; expiaciones dolorosas, o nos perdemos en las falsas ilusiones; la pretendida “felicidad terrenal”, y tantas cosas por el estilo, que llegamos a perder el ánimo y la fe (si es que las tuvimos alguna vez), muletas tan necesarias para caminar, sobre todo, en un camino de piedras y espinos, como es el que debemos recorrer en la Tierra.  Continúa leyendo